¿Qué tan importante es la Vitamina D para mi hijo?

julio 18, 2016 admin No comments exist

 

La vitamina D es una hormona que interviene en muchos aspectos del crecimiento y el desarrollo del niño. Su función está en la absorción del calcio en el intestino para que se deposite en los huesos así asegurando un normal desarrollo óseo. Su principal fuente es la piel con la exposición solar además de algunos alimentos como los pescados grasos.

 

Su importancia para el niño empieza desde el momento de la gestación, una deficiencia de la vitamina D durante el embarazo genera un riesgo sobre la salud ósea del feto, por esto es importante asegurar que la madre gestante tenga niveles normales de la vitamina D para asegurar el buen desarrollo óseo de su hijo(a).

 

Una vez nace el bebe, la leche materna no tiene suficiente vitamina D para el lactante y es recomendable una suplencia durante el periodo de lactancia exclusiva así se evita  una deficiencia a esta edad. Los lactantes que reciben formula láctea no tienen esta necesidad ya que la mayoría de las formulas lácteas están enriquecidas con esta vitamina.

Cabe recordar que la leche materna es el mejor alimento del bebe y debe ser exclusiva los primeros 6 meses y no existe otro alimento que lo reemplace o que sea mejor.

 

 

A la vitamina D se la ha descubierto muchas otras cualidades, además de su efecto sobre el hueso; tales como prevención de los afecciones respiratorias, mejorar el sistema inmune, protección cardiaca y  se habla también de un efecto protector contra el cáncer .

 

Quien requiere suplencia con vitamina D: las madres gestantes, los recién nacidos alimentados con leche materna exclusiva, los niños en climas donde hay poca explosión solar, los niños con piel oscura que no fabrican suficiente vitamina D con la luz solar, y los niños que padecen enfermedades como mala absorción o fibrosis quística o que tienen un régimen alimentario especial como los veganos .

 

Es recomendable el análisis de los niveles de la vitamina D en los niños para así asegurar niveles normales, y si hay deficiencia iniciar la suplencia de modo que así se asegurará un normal desarrollo óseo y de la salud en forma general . 

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